humberto rey v

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lunes, 23 de febrero de 2015

MIS DIEZ MANDAMIENTOS

Creo que la  modernidad exige una ética mínima para que la continuidad de la vida humana siga su curso, sin llegar a límites de salvajismo que nos vuelvan, solamente animales o persistir en ideas trasnochadas que justifiquen nuestros valores.
 El amor, la solidaridad, el sentido de grupo, las relaciones familiares bien entendidas, la amistad, el sentido de la belleza y del arte y por supuesto la inevitabilidad de la muerte son los pilares de la dignidad humana y sobre ellos debemos basar nuestras acciones y metas
Por ello ese decálogo, que ya se insinúa en el código de Hammurabi y que está  implícito en muchos escritos de diversas religiones, que buscaban volver trascendente al humano Homo Sapiens desde quizás hace unos 200.000 años cuando por primera vez se empezó a llevar a cabo el enterrar a los muertos para significar la diferencia entre ellos con las otras especies vivientes debe ser actualizado para adaptarlo a las verdades y realidades del siglo XXI.
El nuevo decálogo podría empezar a postularse de la siguiente manera:

1 Amar la vida sobre todas las cosas
Y este postulado implica que nuestra primera trascendencia notable es de respeto a todo lo vivo y complejo sobre lo inanimado e inerte.
 En su orden están vivas desde las bacterias y levaduras  de donde emergieron las otras especies cada vez mas complejas a medida que se volvieron multicelulares hasta llegar a los humanos, que por el gran desarrollo del Sistema Nervioso son hoy por hoy, los exponentes mas conscientes de la gran complejidad de lo que llamamos VIDA.
El respeto a lo vivo   lleva  implícitos  mandatos como el de no matar a nadie mientras no se ponga en peligro la supervivencia humana digna.
Y  tener una consideración especial con los niños .semilla humana, y con los ancianos que  cumplieron con su compromiso  comunitario de servicio y que ahora descansan en un preámbulo de la muerte y desaparición.
2 Reconocer que como especie  tenemos derecho a la supervivencia, asi estemos limitados por impedimentos, que en otras especies implicarían la desaparición, como son la presencia de defectos congénitos graves, mientras estos no amenacen la vida de otros humanos.
3 La reproducción es otro principio clave para la especie y en este sentido una sexualidad responsable será estimulada como principio ético ,sin que prime sobre el principio de supervivencia y siendo adornada por el amor y la sensibilidad humanas inherentes a nuestra condición de especie comunitaria.
4 Somos una especie comunitaria como lo son las avispas, hormigas y abejas desde hace 150 millones de años.
 Además en nuestra comunicación especial prima un cerebro con gran desarrollo que nos permite pensar, crear, intuir y nos ha permitido en su evolución ser la especie viva que cuestiona e interroga a permanencia pero a pesar de nuestra voluntad de escogencia de caminos de libertad estamos  contaminados de estados inconscientes que nos hacen trastabillar mas de la cuenta cuando escogemos una vía entre varias y la razón, aun cuándo nos fastidie reconocerlo no maneja  el 100% de nuestras decisiones. Cada día mas investigaciones nos dirán cuanto de lo que hacemos u omitimos es consciente o inconsciente.
 Pero esta materia desconocida de nuestra voluntad no es óbice para que se tracen lineamientos morales que nos convienen y  necesitamos todos como sucede con el incesto en múltiples especies animales.
5 Los movimientos religiosos y míticos buscan concatenar lo racional en nuestras búsquedas de sentido con lo que no entendemos y pertenece a los rincones evolutivos de la supervivencia y de la reproducción.
 Todos los ritos y mandamientos que no produzcan daños a otros grupos humanos que piensen distinto deben respetarse.
Pausadamente la ciencia irá aclarando misterios y entonces con ellos perderán fuerza ciertas formas de pensar humanas.
6 La muerte humana debe ser tan digna como la vida misma y se facilitará a  todos los componentes de la comunidad para que la eubiologia preceda en la mejor forma a la eutanasia y la una y otra se unan y complementen.
7 Los bienes materiales deben buscar en primera instancia el beneficio grupal y comunitario y después beneficiar a los  individuos. Para hacer esto hay que respetar el derecho de los otros y acordarse que en las comunidades todos tenemos derechos y deberes con los demás.
La vida en su diversidad debe apreciarse en  las especies animales, sobre todo en aquellas,  similares a la especie humana. Solo se justifica acabar con la vida  cuando el no hacerlo pone en peligro nuestra supervivencia digna y saludable.
10 La vida biológica integral, la cultura, la civilización en su universalidad tolerante y compasionada y  el arte gratificante todos  al unísono junto con las ligazones familiares y amistades no invasoras de las individualidades deben fabricar un humanismo que  facilite los momentos de felicidad mas firmes y agradables en nuestra vida planetaria virtual y real.



3 comentarios:

  1. Me gustaria que los que creen en otros decalogos hicieran comentarios

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  2. Me parecen muy interesantes los planteamientos expuestos por OVEJO. Voy a decicarles unas horas de mi tiempo para analizarlos más detenidamente y poder realizar un comentario sobrio y respetuoso, sobre lo que yo pienso, sobre lo que yo opino al respecto. Ya estaré publicando más adelante, lo que resulte de ese análisis.

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  3. Me parecen muy válidos sus mandamientos, para usted y para la humanidad en general. Nuestras creencias en el aspecto religioso son antagónicas, pero respeto sus puntos de vista y ahora trato de practicar, de vivir los míos. Si yo en verdad sigo los 10 Mandamientos de la Ley de Dios, no necesito nada más para vivir bien y dejar vivir bien a los demás. Pero soy muy débil y además soy adicto al alcohol. Entonces, para poder estar presente en la marcha de la vida, he tenido que tomar como sistema de vida los Doce Pasos de AA, que son principios de índole espiritual, para que los que nos hemos visto abocados al infierno de esas adicciones tan destructivas, encontremos la alegría de vivir. Cariñoso, afectuoso abrazo y gracias por sus escritos y sus inquietudes intelectuales. Lo quiero mucho y me siento muy orgulloso de tenerlo como mi hermano mayor.



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